Hola!
Parece mentira que estemos a cinco de noviembre, y por lo menos en Fuerteventura, sigue haciendo un calor increíble. Estoy deseando que llegue el frío y poder ponerme algún abrigo y cubrirme con una mantita mientras veo la tele, ¡vamos, disfrutar de esas cosas que se hacen en invierno!, pero no, aquí el calor se resiste a dejarnos y eso que hoy han caído algunas gotitas del cielo.
Con tanto calor se me apetecía algo fresquito, ¡una limonada bien fría!. Me iba a poner a ello cuando pensé en entretenerme un poquito más y acabé haciendo unos cupcakes de limón, que estaban deliciosos, y como siempre muy fáciles de hacer.
Con tanto calor se me apetecía algo fresquito, ¡una limonada bien fría!. Me iba a poner a ello cuando pensé en entretenerme un poquito más y acabé haciendo unos cupcakes de limón, que estaban deliciosos, y como siempre muy fáciles de hacer.
He de decir que ha falta de diez minutos para las once de la noche, y aprovechando que Paula ya está durmiendo, he tenido que tomar la dura y difícil decisión de si ponerme a escribir ésta receta o ponerme a planchar, y bueno.... jajaja, ha ganado la idea de sentarme delante del ordenador y ponerme a escribir, ¿por qué será? jajaja. Os cuento:
Para el muffins o base nos hace falta:
- 210 gr. de azúcar.
- 130 gr. de mantequilla a temperatura ambiente.
- 3 huevos.
- 200 gr. de harina.
- Medio sobre de levadura tipo Royal (unos 8 gr. más o menos).
- 130 cc de leche.
- Dos cucharadas de esencia de limón.
Los pasos a seguir son:
En primer lugar, encender el horno, para que se vaya calentando, a 180º con calor arriba y abajo sin ventilador. Si vuestro horno es con ventilador y no lo podéis quitar, ponedlo a 160º.
Comenzamos batiendo la mantequilla (recordad que debe estar a temperatura ambiente) junto con el azúcar hasta que quede cremoso.
Una vez que hemos alcanzado la textura cremosa, añadimos los huevos de uno en uno sin dejar de batir hasta que estén bien integrados.
Finalmente añadimos la leche (mezclada previamente con la esencia de limón) y la harina de manera alternativa sin dejar de batir, hasta alcanzar una masa homogénea.
Ponemos las cápsulas en la bandeja para muffins, o en su defecto, en los moldes para magdalenas (que es lo uso yo por ahora ya que no tengo bandeja). Y ahora la masa ¡a la cápsula!. Y ya está listo para ir al horno.
Pasados unos 25 minutos o cuando al pinchar la masa con un palillo éste salga limpio, estarán nuestros muffins listos.
Cuando los saquemos del horno los dejamos reposar unos 5 minutos en la propia bandeja, y luego los pasamos a una rejilla para que se enfríen. Podremos decorarlos cuando estén totalmente fríos.
Para la buttercream, necesitaremos:
- 125 gramos de mantequilla a temperatura ambiente.
- 175 gramos de azúcar glass previamente tamizada.
- 3 cucharadas de leche.
- Una cucharada de esencia vainilla.
- Una cucharada de esencia de limón.
- Colorante amarillo (opcional).
Para ello, vamos a batir la mantequilla con el azúcar glass previamente tamizado hasta alcanzar una textura cremosa. Una vez alcanzada esa textura, iremos añadiendo la leche y las cucharadas de esencia de uno en uno y batiendo hasta que queden totalmente integrados. En este caso, y para darle un toque más vistoso le puse una gota de colorante alimenticio de color amarillo.
Bueno, ya me diréis si la hacéis y si os ha gustado tanto como a mi marido y a mi, que se los iba a llevar a la oficina y al final nos los hemos comidos todos nosotros dos solos, jajaja, ¡Viva el azúcar! jajaja.
Besos para todos, Yoly.
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Ya sabemos que mañana tu marido no va a ir con la camisa planchada :3
ResponderEliminarjajajaja
Jajaja, Rubén no te preocupes, que aún me quedaban camisas planchadas en el ropero.
EliminarQue buena pinta tiene esto, jejejej
EliminarGracias.
EliminarLimón... mmmmmm!!!! Que buena pinta y segurísimo que esta riquísimooooo!!!
EliminarGracias Esti,a ver si un día los puedes probar que seguro que te encantan
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