Novios de Fondant para una Tarta de Boda (Topper Tarta Nupcial)

Mi hermana y mi cuñado me pidieron desde el principio que les hiciera los muñequitos que pondrían en su tarta de boda, y ¡claro!, ¡les dije que sí encantada!.

¡Y este fue el resultado!

Foto realizada por Sandra Chemida (Fotógrafa)

La verdad es que me asustaba un poco la idea, al fin y al cabo es un elemento importante en ese día, pero aunque no quedaron perfectos, ¡quedé contenta con el resultado!..., ¡y ellos también!. 

Ya os enseñé como iban vestidos los novios cuando os mostré las galletas que les hice para que regalaran a sus invitados, aunque ahora los estáis viendo un poquito más detallados.

El novio fue con el traje de "gran gala", ya os comenté que mi cuñado es policía cuando os enseñé la tarta de despedida de solteros que les hice, ¡y estaba guapísimo!. Nadie se lo esperaba, él mismo se había encargado de decirle a todo el mundo que esa opción no le gustaba, por lo que fue una gran sorpresa para casi todos los invitados a la boda, y digo casi, porque evidentemente unos pocos sabíamos como iba a ir el novio, incluida yo, ¡privilegios que tiene ser la hermana de la novia!

Pues al novio de fondant lo intenté plasmar lo mejor que pude, con su ropa de color azul marino, sus guantes blancos, los botones dorados, su pelo peinado a un lado (especial para la ocasión), etc. y digo intentar, porque el modelado del fondant fue una locura. 

Mi cuñado me llamó un día para decirme que había encontrado por casualidad en una tienda el fondant del color de su ropa y que si me parecía bien lo compraba, y claro, le dije que sí, pero... ¡que fondant más malo para modelar!, ¡o por lo menos yo no lo metí a camino!, ¡fatal!. El novio, que iba a ser mucho más sencillo, me costó una barbaridad, no conseguía que se quedara sin grietas y me vi teniendo que utilizar algún truquillo para que quedara decente, pero creo que al final no se notó mucho y mis sudores y lágrimas sólo quedaron entre el muñeco y yo, jejeje. 

Y la novia... la novia estaba guapísima, preciosa, radiante, feliz..., bueno, ¡que va a decir una hermana!... y evidentemente su muñequita de fondant no le hacía justicia, pero la hice también con mucho cariño, con su pelo rubio, sus ojos verdes, sus pendientes, y el peinado a un lado, con el que intenté ser muy meticulosa y para ello usé como referencia unas fotos que mi hermana me había mandando, aunque luego se quedó oculto por el velo y el gorro.

Su traje fue un poco más entretenido de hacer, ya que el original estaba lleno de encajes, que es lo que caracterizaba al vestido en sí, y claro, ahí estaba la dificultad, ¿como representar ese bordado? Al final lo que hice fue cubrir el traje de la novia de fondant con la tela del propio velo de la novia. ¡Sí...!, al retocarle el velo a mi hermana en la tienda de novias le sobró un trocito y lo utilicé. Así que esta novia de fodnant no sólo tiene su traje en palabra de honor y con forma de corazón en el escote, sino que lleva parte de la misma tela que la novia.

Para darle un aspecto más simpático la novia lleva el gorro del novio, cosa que les hizo mucha gracia a los recién casados cuando lo vieron puesto que pocos minutos antes habían hecho lo mismo en su sesión de fotos.

El ramo es el único elemento que no tiene nada que ver con el que llevó mi hermana y es que ella me decía que no tenía ni idea de como sería. Y yo le decía, ¡pero Sabi, como no vas a saberlo, eres la única novia de la historia que no sabe como va a ser su ramo!, y ella me contestaba que confiaba plenamente en su florista  y que se dejaría llevar por ella, que lo único que sabía era que era caído y de colores amarillo y violeta, pero claro, todo tenía truco, y es que la única que no sabía como sería el ramo era yo, ¡que ingenua soy!, jajaja. Y os preguntaréis que cómo es que mi hermana no me dijo como iba a ser el ramo si sabía que yo le iba a hacer los muñequitos de la tarta, pues por una razón muy simple y es que mi hermana quería que me llevara una sorpresa cuando la viera con "mi ramo de novia". ¡Sí!, habéis leído bien, "mi ramo de novia". Cuando yo me casé se lo di a ella, un ramo precioso con toda una obra de ingeniería detrás que me hizo Momo de la floristería San Juan de Arucas (actualmente cerrado). Mi hermana lo conservó, las flores se fueron marchitando y cayendo pero la estructura se mantuvo impecable, y ¡lo usó!. Creo que es de la pocas novias, por no decir la única, que ha utilizado un ramo que ya estuvo en otra boda, ¡y a ver si se convierte en una tradición, que se lo pasó a mi otra hermana!... ¡yo lo dejo caer!... Bueno, os pongo las fotos de los dos ramos para que los veáis, que me hace ilu.

Lo se, ¡nada que ver con el que lleva la novia de fondant!

Os pongo más fotos, con los novios siempre a puntito de cogerse las manos y entrelazar sus miradas...:

Y ahora solo me queda enseñaros como quedó esta pareja de novios sobre su tarta. Las fotos que vais a ver son de Sandra Chemida, a quien agradezco enormemente que me permitiera poder publicarlas en mi blog. Sandra es una persona encantadora y una "superfotógrafa", ¡sólo hay que ver sus fotos!..., ¡yo quiero su ojo para la fotografía!, ¡me vendría muy bien para el blog!, jajaja. 

Fotografía realizada por Sandra Chemida (Fotógrafa)

Fotografía realizada por Sandra Chemida (Fotógrafa)

Fotografía realizada por Sandra Chemida (Fotógrafa)

Fotografía realizada por Sandra Chemida (Fotógrafa)

Bueno, pues con estos muñequitos de tarta termino de enseñaros la aportación de Fondantymas a esta preciosa boda, ¡ahora sólo me quedaría contaros la boda en sí!, y... ¡pienso hacerlo!,... ¡ya estáis avisados!, jajaja.

Besos y feliz semana.

Yoly.

Si queréis ver las galletas para los invitados pinchad aquí:

Si queréis ver la tarta de despedida de solteros pinchad aquí:

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